Este año (2017), casi en el tiempo de "descuento", como ya va siendo
tradición, y a hurtadillas, en la tarde del viernes 29 de diciembre, se hacen
públicos los "números" de los que "no cuentan".
Seguimos negándonos a que nos los cuelen como simples datos estadísticos,
a partir de los que elucubrar mil y una teorías de causalidades, efectos,
costes o tendencias.
Son, sin lugar a duda, 93.131 dramas a los que se les negó una
solución civilizada. Porque se resolvieron al amparo de una ley inicua, que
consagra como derecho "el matar para desembarazarte" al ser que
habita las "entrañas de su madre".
En la página web del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad se
publicó un extenso informe de 202 páginas que titula “Interrupción Voluntaria
del Embarazo. Datos definitivos correspondientes al año 2016” resumidos en un número mágico, aséptico, sobre
el que se elucubra estadísticamente, unos 93.131 abortos —ellos dicen IVE— que
les sirven para rellenar mucha letra, muchas tablas, muchos datos recopilados, pero
ninguna mención a que, también estamos hablando de muertos por aborto —al menos
uno— tras de cada desembarazo.
Yo diría que son 93.131 victimas de una guerra, cruel e inhumana, ¡mundial!
Que se está librando contra los más débiles e indefensos de los seres humanos.
Sin campos de batalla, ni prisioneros, ni desplazados, ni reporteros, ni
convención de Ginebra…, una guerra en la que al enemigo, se le acosa y elimina
sin piedad, en el más recóndito de los refugios, …en el vientre de su madre. Sirviéndose de armas tan eficaces, tan
mortíferas, o incluso más, que las bombas antipersonas ….el silencio, la ocultación y la mentira les sirven para retorcer "la verdad de los hechos" hasta un grado tal, que la tornan irreconocible. La ingeniería de la postverdad.
En la “era” de los derechos humanos, de los derechos de los niños, de las ONGs
salvadoras de mil causas,… no hay sitio para el concebido no nacido, que
ha venido a la vida en el tiempo “mas inoportuno” para su madre y los que la
empujan a desembarazarse de él.
En la imagen os resumo mi reflexión/valoración, al tiempo que os invito a
desactivar las minas antipersonas que son NUESTROS SILENCIOS.
En el siguiente grafico... podeis comprobar como, desgraciadamente, continua al alza el NEGOCIO de los abortorios.