domingo, 9 de noviembre de 2025

A las 12 semanas de vida...


 A las 12 semanas, la vida humana ya es innegable.

En ese momento el corazón del bebé lleva más de ocho semanas latiendo.

Sus dedos, uñas, rostro y órganos vitales están formados.

Reacciona a los estímulos y comienza a mover su cuerpo con independencia.

No es un proyecto de vida, es vida en desarrollo.

Cuando se aprueban leyes que permiten terminar con esa existencia, no se está hablando de “células”, sino de un ser humano con identidad genética única, completamente distinto de su madre.

La pregunta ética es simple, si ya hay latido, movimiento y humanidad,

¿No merece también protección?